¿Qué es el síndrome del ojo seco?
El ojo seco es un término utilizado para hacer referencia a anormalidades de la película lagrimal que recubre la superficie del ojo, protege los tejidos y mantiene una buena visión. Ojo seco no significa necesariamente que estén “secos” de hecho, muchas personas diagnosticadas presentan lagrimeo y, por lo general, este lagrimeo se debe a una mala calidad de la lágrima.
Los síntomas más frecuentes suelen ser sensación de arenilla, lagrimeo, visión borrosa fluctuante, escozor de ojos, sensibilidad a la luz (fotofobia), cansancio ocular al leer, ver la televisión, utilizar ordenador o conducir, intolerancia a lentes de contacto, pesadez de los párpados y, en algunos casos, dolor ocular.
Existen muchas causas y factores de riesgo para padecer ojo seco. Algunas de ellas son la edad avanzada, menopausia, factores ambientales, mala alimentación, efectos secundarios de medicamentos o utilización de lentes de contacto.
Se trata de un problema muy frecuente, alrededor del 30% de los pacientes que acuden a una consulta oftalmológica.
El primer paso en el tratamiento son las lágrimas artificiales, en distintas formas de presentación y con distintas viscosidades.
Otras medidas útiles son:
-No fumar, los fumadores tienen el doble de probabilidades de desarrollar el síndrome de ojo seco que los no fumadores. Está demostrado la mejoria de los sintomas de ojo seco al dejar de fumar.
-Estrategias ambientales: están dirigidas a evitar todos aquellos desencadenantes que contribuyen a aumentar la sequedad ocular, evitar exposición prolongada a aparatos de aire acondicionado, calefactores, ambientes con mucho humo. También se aconseja la utilización de humidificadores sobre todo en invierno.
Un mal que puede llegar a ser muy frustrante e incapacitante.
Saludos desde Lágrimas Artificiales 🙂