Degeneración macular – Dto por OCT
La Degeneración Macular Asociada a la Edad ( DMAE) es una enfermedad degenerativa de la zona central de la retina llamada mácula, que provoca un deterioro progresivo de las células retinianas a ese nivel dando lugar a una perdida de la visión central. Esta enfermedad es más común en personas de más de 60 años, razón por la cual a menudo se denomina degeneración macular asociada a la edad (DMAE).
Existen dos tipos de degeneración macular asociada a la edad:
1. DMAE «seca» (atrófica): La mayoría de las personas padece de degeneración macular «seca». Es ocasionada por el envejecimiento y adelgazamiento de los tejidos de la mácula. La pérdida de la visión generalmente es gradual.
2. DMAE «húmeda» (exudativa): La degeneración macular «húmeda» constituye aproximadamente el 10% de todos los casos. Se desarrolla al formarse vasos sanguíneos anormales en la parte posterior del ojo. Estos nuevos vasos sanguíneos dejan escapar fluido o sangre y ocasionan que la visión central se torne borrosa. La pérdida de la vista puede ser rápida y severa.
Factores de riesgo de la DMAE:
- La edad
- El tabaco
- La hipertensión arterial
- Predisposición familiar
- Dietas ricas en grasa
Síntomas de la DMAE
La degeneración macular puede tener distintos síntomas en cada persona. Al principio, esta enfermedad puede ser casi imperceptible. Muchas veces es solo un ojo el que tiene pérdida de visión mientras que el otro ojo continúa viendo correctamente por muchos años. Pero cuando ambos ojos se afectan, la pérdida de la visión central puede hacerse aparente con más rapidez. A continuación indicamos algunas de las formas en las que se puede detectar la pérdida de la visión:
- Dificultad al leer.
- En el centro de la visión aparece un área oscura o vacía.
- Las líneas rectas se ven distorsionadas.
Diagnostico de la DMAE: Se puede diagnosticar en las primeras fases de la enfermedad mediante unas sencillas exploraciones:
- Exploración de Fondo de Ojo
- Rejilla de Amsler
- Tomografía de Coherencia Óptica (OCT).
Pronóstico de DMAE:
La DMAE no afecta la visión lateral o periférica. Esto es muy importante, porque significa que nunca habrá una pérdida de la visión completa. En el caso de la DMAE seca y leve, por lo general no ocasiona una pérdida de la visión central incapacitante. Sin embargo, no existe una forma de predecir quién padecerá una forma más grave de la enfermedad. En cambio la DMAE húmeda, a menudo lleva a que se presente una pérdida importante de la visión.
En general, la degeneración macular puede provocar que usted pierda su capacidad para leer, conducir y reconocer caras a una distancia. Pero la mayoría de las personas con esta enfermedad ocular son capaces de realizar tareas habituales sin demasiada dificultad. La mejor manera de detectar cambios es autoevaluándose en el hogar con una rejilla de Amsler. Evalúe individualmente cada ojo con la corrección de la visión que usted normalmente usa para leer.
Prevención: Aunque no hay ninguna manera conocida de prevenir la degeneración macular, los factores del estilo de vida pueden reducir el riesgo de desarrollar la enfermedad:
- No fume
- Dieta rica en frutas y verduras y baja en grasa animal
- Haga ejercicio de manera regular
- Mantenga un peso saludable
Tratamiento de la DMAE:
Si usted tiene DMAE seca grave o avanzada, ningún tratamiento puede restablecer la visión. Pero si tiene DMAE incipiente y no fuma, una combinación de ciertas vitaminas, antioxidantes y zinc pueden evitar el empeoramiento de la enfermedad, ayudando a hacer más lenta su progresión hacia etapas más avanzadas. Sin embargo, esto no devolverá la visión que ya se haya perdido.
El tratamiento para la DMAE húmeda intenta controlar la enfermedad mediante fármacos intravitreos antiangiogénicos (anti-VEGF) que tratan de frenar el crecimiento de los vasos sanguíneos anómalos.
Fuentes: AAO (American Academy of Ophthalmology) y Medline Plus